Cuatro vecinos de Iquique, entre ellos el presidente de la Junta de Vecinos Coliseo, Rubén Pérez, quedaron con arraigo nacional tras ser formalizados por participar en una protesta en el centro de la ciudad, donde se quemaron neumáticos para exigir mayor presencia policial. La manifestación se desarrolló el martes en respuesta a las recientes balaceras que han generado preocupación en el sector.
El Juzgado de Garantía de Iquique dejó en libertad a los imputados y fijó un plazo de investigación de 60 días. Pérez, quien lidera una de las organizaciones vecinales más activas del centro, fue detenido por más de 27 horas, luego de encabezar la manifestación que interrumpió el tránsito vehicular en la calle Thompson, una zona donde se han concentrado los últimos episodios de violencia.
El hecho se produce en medio de una serie de reuniones entre vecinos y autoridades, motivadas por el aumento de delitos violentos, tráfico de drogas y constantes tiroteos. La comunidad reclama presencia permanente de Carabineros en los sectores más críticos, y ha solicitado medidas concretas como la instalación de un retén móvil.
Desde el municipio y el concejo comunal se ha insistido en la necesidad de reforzar la seguridad en el centro. En paralelo, Carabineros anunció la implementación de patrullajes por cuadrículas, mientras los dirigentes aseguran que seguirán movilizados hasta que se vean cambios reales en las calles.
La defensora penal pública, Nicole Acuña Carvajal, acompañó a los vecinos durante la audiencia de control de detención. Indicó que las medidas cautelares aplicadas permiten que los imputados enfrenten el proceso en libertad, mientras avanza la investigación por los hechos ocurridos en la vía pública.
