Este fin de semana se reunieron el alcalde de Arica, Gerardo Espíndola junto al delegado presidencial, Ricardo Sanzana, con el fin de analizar y abordar las distintas áreas de intervención que se realizarán con la instalación del Gobierno a través del “Plan Calles Sin Violencia” en la comuna.
En ese sentido, Gerardo Espíndola, alcalde de la comuna de Arica, comentó que hay que trabajar rápido, pues este Plan contempla fortalecer a la Fiscalía y la PDI para investigar la realización real de persecución del delincuente. “Es aumentar las rondas policiales con más carabineros patrullando las calles a lo que se suma la incorporación de vehículos de las Municipalidad, la fiscalización de incivilidades y finalmente la recuperación de espacios públicos”, expresó.
Cabe señalar que este Plan se enmarca en la Política Nacional contra el Crimen Organizado, una estrategia de largo plazo que tiene por objetivo desbaratar organizaciones criminales, disminuyendo su poder de fuego y económico, bajo cuatro ejes estratégicos:
-Robustecer a la fiscalía para la persecución penal de los delitos.
-Fortalecer las poblaciones con mayor presencia de carabineros con rondas policiales.
-Fiscalización de incivilidades con más control en la venta y consumo de alcohol en las calles, venta clandestina de comidas, entre otras.
-Intervención comunitaria, recuperación de espacios públicos, identificación de personas que tengan antecedentes y órdenes de detención vigentes.
Por su parte, Ricardo Sanzana, delegado presidencial de Arica y Parinacota, comentó que estas nuevas formas de delitos y de organizaciones delictuales ponen un desafío grande al Estado, “esto no es solamente una posibilidad de que nosotros demos respuesta como Gobierno, es una respuesta de Estado, queremos dar la tranquilidad que se está trabajando en ese sentido, no solamente a nivel municipal y de gobierno regional, sino que con los parlamentarios de la zona”, indicó.