ALCALDE DE ARICA: “LA REAPERTURA DE FRONTERAS NO SIGNIFICARÁ ARREGLAR EL PROBLEMA MIGRATORIO”
La máxima autoridad comunal, Gerardo Espíndola, posterior a la publicación de las determinaciones entregadas el día de ayer por el presidente Piñera en una conferencia de prensa en La Moneda, señaló que la reapertura de fronteras no es la solución al actual problema migratorio que afecta al norte de Chile, sobre todo en un contexto de pandemia tan volátil como en el que se encuentra el país.
En conversación con el medio de Tacna Radio Uno, el jefe comunal indicó que es inevitable una reapertura fronteriza en algún momento del futuro, pero es una decisión que debe ser estudiada permanentemente debido a que el panorama nacional y mundial evoluciona constantemente.
“Hay que observarlo. Creo que la reapertura de frontera siempre hay que estudiarla, en algún momento la frontera se va a tener que abrir. Pero creo que abrir la frontera no va a significar necesariamente arreglar el problema migratorio”, señaló.
Junto con ello, Espíndola expresó que “si se abre, debe venir con ciertos requisitos puntuales para internar darle un ordenamiento al tema migratorio. Lo otro, es que hay que observar cómo se comporta el virus. Ojalá no aparezca una nueva variante, porque va a retroceder nuevamente todo”.
La máxima autoridad comunal recordó que, en el marco del primer anuncio de una eventual reapertura, el pasado 21 de diciembre, Arica se encontraba en Fase Cuatro con un contexto sanitario muy distinto al actual, y con una variante Omicron que ha significado un agresivo aumento de contagios a nivel nacional.
Por lo mismo, y con la región sumida en Fase Dos, es poco probable que hoy vuelva a operar Chacalluta. “Cuando se intentó abrir la frontera en un momento, estábamos en Fase Cuatro. Eso fue cuando se comenzó a hablar de la posibilidad de abrir las fronteras (…) La primera vez, nosotros insistimos harto de que no era el momento para hacerlo, porque le estaban dando 15 días a la ciudad y ni siquiera había una coordinación con el Perú”, enfatizó.
En todo caso, Espíndola manifestó que dicha decisión debe pasar por una situación humanitaria y no comercial, tal como fue pensado en un principio donde los requisitos para cruzar los controles migratorios, dificultaban sobremanera el paso para viajeros de un solo día.
“En el caso de Chile, la frontera iba a funcionar por unas horas al día, no las 24 horas, con una exigencia de PCR de salida y de entrada, de seguros contra el Covid y otra serie de restricciones que, lo que buscaban, era abrir fronteras con un propósito primeramente humanitario, pensando en familias que llevan dos años separadas”.
El alcalde agregó que la medida “buscaba desincentivar este turismo que permanente existe entre Tacna y Arica, donde uno cruza la frontera para comprar y en la tarde vuelve o venían por el día a la playa en Arica y luego se devolvían”. Una realidad que, a visión del jefe comunal, es improbable que pueda volver en el corto y mediano plazo. “No hay que hacerse tantas expectativas de que se va a abrir la frontera y de que se van a generar una serie de soluciones, de que vamos a poder recuperar la normalidad a la que estábamos acostumbrados. Nunca va a ser así y creo que no se va a recuperar. Vamos a tener que acostumbrarnos a otra realidad”, sentenció.