ACCIDENTE VUELO SYDNEY – SANTIAGO: EMPRESA AMERICANA ADVIRTIÓ QUE MODELO DE AVIÓN TENÍA PROBLEMAS DE DESHIELO
Al menos 50 personas han terminado heridas este lunes debido a un complicado incidente registrado en un vuelo de la aerolínea chileno-brasileña Latam, el que despegó desde la ciudad de Sidney, Australia, con destino a Santiago de Chile. Los 13 pasajeros más afectados fueron enviados a un hospital de la ciudad de Auckland, Nueva Zelanda, a causa de sus lesiones; uno de ellos en estado grave, según detallan los equipos de emergencias nacional.
A causa de este incidente, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, advirtió que hace poco más de una semana los aviones «Boeing Dreamliners» presentaban problemas en su sistema de deshielo.
Es precisamente este modelo el que corresponde al mismo avión cuyo vuelo produjo este accidente, debido a un «incidente técnico».
Así lo informó CNN internacional, el que indicó que «los «Boeing Dreamliners» presentaron complicaciones en el sistema de deshielo, lo que provocaría daños en la entrada del motor.
El medio estadounidense reveló que la empresa fabricante emitió un comunicado diciendo que ninguno de los problemas es «una preocupación inmediata sobre la seguridad del vuelo basada en un extenso análisis de ingeniería», y que, a razón de ello habría decidido no sacar dichas aeronaves de circulación, bajo el compromiso de colocar sus «amplios esfuerzos para mejorar aún más la seguridad de los aviones incluyen la revisión sistemática de los problemas».
Por su parte, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), anunció que enviará a un «representante acreditado» a Nueva Zelanda para investigar la emergencia.
Si bien la aerolínea no entregó detalles de sobre los motivos del accidente, los presentes relataron que la aeronave experimentó una «pequeña caída rápida» y que «se congeló en el aire», según declaraciones recogidas por el diario New Zealand Herald.
