La Policía de Investigaciones (PDI) incautó, en dos procesos simultáneos, más de una tonelada de droga que ingresó a Chile por pasos no habilitados desde Bolivia y que iba a ser distribuida y comercializada en Santiago.
«Tenemos dos procedimientos importantes, el segundo se desprende de la matriz que es la investigación de una organización de origen colombiano. En total, se da cuenta de la incautación de sobre 1.100 kilos de estimulantes tanto en clorhidrato de cocaína como cocaína base y cannabis sativa», dijo el jefe nacional Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado, el prefecto inspector Paulo Contreras.
La primera operación, denominada «Águila Norte», logró el decomiso de 800 kilos de droga, valorados en casi 12.000 millones de pesos, además de la detención de cuatro personas, todos chilenos y uno de ellos menor de 17 años, que cumplían el rol de transportistas de la droga desde el norte hacia la capital en camiones.
La otra operación «Operación Rey de Oro», en tanto, terminó con la incautación de 300 kilos de drogas, avaluados entre 500 millones de pesos. Tres ciudadanos bolivianos fueron detenidos.