La Región de Arica respiró luego de que el Consejo Regional (CORE) aprobara de manera transversal una inyección de $3.892 millones para impedir el colapso funcional del Hospital Dr. Juan Noé. Esta medida de urgencia se tomó para evitar la suspensión masiva de cirugías, la interrupción de la entrega de medicamentos y la afectación de tratamientos clave, como los oncológicos.
Es así como en la XXII Sesión del CORE, consejeros y el gobernador Diego Paco acordaron entregar el monto para dar continuidad operativa al centro asistencial, el cual se encontraba al borde de una crisis financiera que amenazaba su funcionamiento básico.
En esa línea, Patricia Sanhueza, directora del Servicio de Salud de Arica, agradeció la decisión, señalando que permitirá “dar continuidad operativa al Hospital Regional y mantener la atención quirúrgica, especialidades, entrega de medicamentos y otras prestaciones fundamentales”.
Con esta inversión regional se evitó riesgos inmediatos, como la posible suspensión del 70-80% de las cirugías y la afectación directa a miles de pacientes.
CRÍTICAS AL MINSAL: «ES EL GOBIERNO CENTRAL QUIEN DEBE HACERLO»
Aunque la aprobación fue unánime, estuvo marcada por fuertes críticas dirigidas al Ministerio de Salud (MINSAL) y al nivel central, señalando que la región no debería asumir errores que son de gestión nacional.
En ese sentido, el gobernador Diego Paco resumió la posición regional, señalando que «es una situación grave… es el MINSAL quien debe hacerlo,» recalcando que la región no puede seguir pagando los errores del Gobierno central, aunque siempre estará disponible para apoyar en momentos críticos.
Por su parte, la consejera Lorena Ventura fue directa al describir la gravedad del escenario financiero, indicando que, “el hospital lo tenemos en la UCI… no concibo que sea bien catalogado por MINSAL, pero los recursos no estén,» mientras la presidenta de la Comisión de Salud, Romina Cifuentes, lamentó que problemas nacionales recaigan en Arica.
Finalmente, la preocupación se extendió a la falta de planificación, como lo expresó el consejero Ignacio Gómez, señalando: «Es vergonzoso que este Gobierno no tenga claridad de lo que va a ocurrir… no lo celebro, me preocupa qué ocurrirá el próximo año,» exigiendo una solución estructural para 2025.
