
En el detalle, el mayor monto lo obtendrá Renzo Trisotti (Republicanos), quien alcanzó 51.010 votos, equivalentes a un reembolso estimado de $80.350.000. Le sigue la senadora electa Danisa Astudillo (PS), que obtuvo 32.521 votos, y gracias al plus por ser mujer recibirá un total proyectado de $64.445.000.
Los nuevos representantes de Tarapacá no solo celebran sus escaños. También se preparan para recibir millones en reembolsos del Estado, dinero que forma parte del mecanismo legal de financiamiento electoral y que hoy vuelve a la discusión pública por las enormes cifras involucradas.
En la Cámara de Diputados, el mayor monto lo obtendrá Carlos Carvajal (IND–PPD), con $40.188.000, seguido de Ximena Naranjo (IND–UDI) con $30.567.000, y Álvaro Jofré (PNL) con $23.607.000.
En total, los cinco electos de Tarapacá podrían recibir cerca de $240 millones, dinero que será reembolsado directamente por el Fisco, tal como establece la Ley de Financiamiento Electoral.
CUÁNTO RECIBIRÁ CADA ELECTO DE TARAPACÁ
SENADORES — Los mayores montos
| Senador/a | Votos | Cálculo por voto | Reembolso estimado |
|---|---|---|---|
| Renzo Trisotti (Republicanos) | 51.010 | $1.585 | $80.350.000 |
| Danisa Astudillo (PS) | 32.521 | $1.981 (incluye plus mujer) | $64.445.000 |
DIPUTADOS — Reembolsos proyectados
| Diputado/a | Votos | Cálculo por voto | Reembolso estimado |
|---|---|---|---|
| Carlos Carvajal (IND–PPD) | 25.360 | $1.585 | $40.188.000 |
| Ximena Naranjo (IND–UDI) | 19.298 | $1.981 (incluye plus mujer) | $30.567.000 |
| Álvaro Jofré (PNL) | 14.898 | $1.585 | $23.607.000 |
TOTAL QUE EL ESTADO PODRÍA PAGAR EN TARAPACÁ
| Cámara | Total estimado |
|---|---|
| Diputados | $94.362.000 |
| Senadores | $144.795.000 |
| TOTAL REGIONAL | $239.157.000 |
¿CÓMO FUNCIONA EL REEMBOLSO ELECTORAL?
Para entender estas cifras, hay que volver al origen: el sistema chileno de financiamiento electoral.
Un mecanismo legal, sí. Transparente, según el Servel. Pero que una y otra vez genera debate cuando se revelan montos como los registrados ayer.
El principio es simple: en Chile, cada voto tiene un valor en dinero. No es un premio ni un incentivo: es un tope para definir cuánto puede devolver el Estado por los gastos de campaña de un candidato.
Pero detrás del mecanismo hay detalles que suelen quedar fuera de la conversación:
1. Gane o pierda, el candidato puede recibir dinero. El reembolso no depende del resultado, sino de cumplir las reglas de rendición.
2. No es automático. El Servel paga solo si el candidato acredita gastos reales con boletas y facturas vigentes.
3. La ley fija el valor de cada voto. En elecciones parlamentarias:
- 0,04 UF por voto (≈ $1.585)
- +0,01 UF extra si la candidata es mujer (≈ $396)
4. El Estado no devuelve más de lo gastado. Aunque sus votos permitan un tope de $40 millones, si el candidato gastó $20 millones, recibe $20 millones.
5. Todo sale del presupuesto público. De los impuestos. Del bolsillo de todos.
Así, voto a voto, factura a factura, el sistema —creado para evitar el financiamiento irregular— termina desembolsando montos millonarios como los que hoy recibirán Trisotti, Astudillo, Carvajal, Naranjo y Jofré.
La ley lo permite. El Servel lo fiscaliza. Pero la pregunta vuelve cada elección: ¿es este realmente el sistema más justo? ¿Usted qué opina?









