
El Colegio de Profesoras y Profesores de Chile expresó su profunda preocupación por la disminución significativa de recursos destinada a los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) en la Ley de Presupuestos 2026, actualmente en discusión en el Congreso Nacional. Según el gremio, esta medida podría generar despidos masivos de docentes y asistentes de educación, además de un grave retroceso en la calidad de la educación pública.
Mario Aguilar Arévalo, presidente del Colegio, afirmó que “el presupuesto contempla una reducción preocupante de recursos para los SLEP. Lo que se necesita es lo contrario: fortalecer la educación pública, no recortarla”.
El dirigente explicó que la disminución presupuestaria responde a directrices de la Dirección de Presupuestos (DIPRES), que habrían instruido a los SLEP a ajustar su dotación antes de marzo de 2026, lo que, en términos prácticos, implicaría despido de docentes y personal educativo. Aguilar calificó estas instrucciones de “amenazantes” y advirtió que la DIPRES incluso estaría presionando a los directores de los SLEP con la posibilidad de destitución si no cumplen con los despidos. “Eso es actuar como en dictadura y no corresponde en un gobierno que se dice cercano a los trabajadores”, señaló.
El presidente del gremio enfatizó que lo que requiere el sistema educativo es estabilidad laboral y más recursos para mantener la calidad de la enseñanza. “Los docentes, asistentes y funcionarios son el corazón del desarrollo educativo. Sin ellos, cualquier reforma o iniciativa pierde sentido”, subrayó.
Entre los efectos que podría generar este recorte, Aguilar mencionó cursos con hasta 45 estudiantes, fusión de niveles y cierre de establecimientos, afectando directamente a estudiantes y comunidades educativas.
Finalmente, el Colegio de Profesoras y Profesores hizo un llamado al Congreso Nacional a rechazar la propuesta de Presupuesto 2026 mientras mantenga los recortes a los SLEP. “Exigimos que los parlamentarios de todos los sectores no aprueben un presupuesto que atenta contra la estabilidad laboral docente y el fortalecimiento de la educación pública en Chile”, concluyó Aguilar.







