
En una emotiva ceremonia en el cuartel Angamos, la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) vivió un momento de recambio y proyección. Con la mirada puesta en los nuevos desafíos de seguridad que golpean al extremo norte del país, el prefecto inspector José Contreras Hernández asumió oficialmente como jefe regional de la PDI en Arica y Parinacota, relevando al prefecto inspector Luis Álamos Meneses, quien se despidió de la institución tras casi dos años al mando.
El aire en el auditorio del Cuartel Angamos estaba cargado de emoción. Uniformes impecables, miradas firmes y un silencio respetuoso antecedieron el cambio de mando que marca una nueva etapa para la región policial más septentrional de Chile. No era solo una ceremonia institucional, sino el traspaso simbólico de una responsabilidad inmensa: conducir a los hombres y mujeres que día a día enfrentan los desafíos del crimen organizado en la puerta norte del país.
El prefecto inspector José Contreras Hernández no desconoce esa realidad. Con una trayectoria consolidada en la investigación criminal y el combate a organizaciones transnacionales, llega a Arica con una visión clara: fortalecer la presencia investigativa, el trabajo conjunto con otras instituciones y la confianza de la ciudadanía.
“Es una oportunidad de crecimiento desde lo personal y lo profesional, pero también un desafío colectivo”, expresó Contreras en su discurso de asunción. “Queremos desarrollar el trabajo policial en la región, fortalecerlo junto a nuestros socios estratégicos y avanzar con las directrices del Plan Estratégico Institucional. Asumir en una zona extrema, donde confluyen tantos fenómenos delictivos transfronterizos, es un reto que abrazamos con compromiso y convicción”.
El acto contó con la presencia de autoridades regionales y nacionales: el gobernador regional Diego Paco Mamani, el delegado presidencial (s) Nicolás González Gutiérrez, el fiscal regional Mario Carrera Guerrero y la seremi de Seguridad Pública Elsa Cortez San Francisco, entre otros. La ceremonia fue intervenida por el prefecto general Rodrigo Fuentes Azócar, jefe de la Subdirección Científica y de Análisis Criminal, quien destacó la importancia de la continuidad institucional en una región estratégica para el país.
El prefecto inspector Luis Álamos Meneses, visiblemente emocionado, se despidió del cargo con palabras de gratitud y orgullo:
“Hoy entrego el mando con la satisfacción del deber cumplido y el orgullo de haber liderado el excelente trabajo de nuestros funcionarios en una zona compleja y desafiante. Han sido meses de compromiso, coordinación y resultados. Me voy agradecido de cada detective, de cada funcionario, y de las autoridades que siempre acompañaron nuestra labor”.
Durante su gestión, Álamos impulsó operativos claves contra el narcotráfico, fortaleció las unidades especializadas y consolidó la cooperación con las instituciones locales, dejando un legado de eficiencia operativa y trabajo comunitario.
Con el nuevo mando, la PDI en Arica inicia una etapa marcada por la modernización, la inteligencia policial y la cooperación interinstitucional, pilares fundamentales para enfrentar los delitos que cruzan fronteras y afectan directamente la seguridad nacional.
La ceremonia concluyó con un aplauso cerrado, reflejo de respeto, pero también de esperanza. En el extremo norte de Chile, donde el desierto se cruza con la vigilancia constante, un nuevo liderazgo comienza su ruta, guiado por la convicción de que la seguridad también se construye con compromiso, cercanía y vocación de servicio.