
Con una inversión que reúne aportes del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU), el municipio y la propia comunidad, la comuna de Alto Hospicio se prepara para dar un nuevo paso en materia de conectividad y desarrollo urbano. El alcalde Patricio Ferreira confirmó el inicio de las obras correspondientes al Programa de Pavimentos Participativos N°34, que permitirá pavimentar cinco calles y mejorar dos veredas en barrios que por años habían esperado estas mejoras.
Calles y veredas que cambian la vida diaria
El proyecto contempla intervenciones en distintos puntos de la ciudad. En el sector La Tortuga, se trabajará en las veredas de las calles San Donato y Alto Molle, espacios que hoy presentan deterioro y representan un riesgo para peatones, especialmente adultos mayores y niños.
En paralelo, la pavimentación alcanzará arterias estratégicas de la comuna:
- Calle Japón, en el sector La Pampa, entre Unión Europea y Teniente Cubillos.
- Los Damascos, desde Circunvalación hasta Los Guindales.
- Pan de Azúcar, en el tramo entre Cerro Esmeralda y Los Guindales.
- Pasaje Macaya y Pasaje Tocopilla, ambos en su extensión completa.
Estas obras, detalló la autoridad, beneficiarán directamente a cientos de familias, mejorando no solo la conectividad vehicular, sino también la seguridad y calidad de vida de quienes habitan en zonas que hasta ahora dependían de caminos de tierra o pavimentos en mal estado.
Una fórmula tripartita de inversión

El alcalde Ferreira subrayó que este tipo de proyectos se concretan gracias al esfuerzo conjunto entre Estado, municipio y vecinos, quienes participan activamente en el financiamiento y gestión. “Cada metro de pavimento que instalamos es producto de la unión de voluntades. No se trata solo de infraestructura, sino de dignidad y oportunidades para las familias hospicianas”, recalcó.
Impacto en la conectividad local
Las nuevas pavimentaciones buscan agilizar el tránsito en sectores de alta circulación y mejorar el acceso a servicios básicos. Según la Dirección de Tránsito, estas arterias forman parte de una red secundaria que conecta barrios residenciales con vías principales, por lo que su intervención reducirá tiempos de traslado y contribuirá a descongestionar otros sectores.
Alto Hospicio en proceso de transformación
En los últimos años, la comuna ha experimentado un fuerte crecimiento poblacional que exige mejoras constantes en infraestructura urbana. El Programa de Pavimentos Participativos se ha convertido en una herramienta clave para responder a estas demandas, permitiendo avanzar en un proceso de modernización que, según la autoridad, “está cambiando el rostro de Alto Hospicio, barrio a barrio, calle a calle”.
Más que cemento: seguridad y pertenencia
Además del impacto vial, el municipio resaltó que el mejoramiento de veredas y calles representa un aporte a la seguridad de peatones, al disminuir riesgos de caídas y mejorar la iluminación pública. Asimismo, estas obras refuerzan el sentido de pertenencia de los vecinos, quienes ven cómo su aporte económico y compromiso con el programa se traduce en mejoras concretas frente a sus hogares.
“Lo que antes eran calles de tierra o con pavimentos desgastados, ahora se transformarán en espacios dignos, seguros y accesibles. Eso es construir ciudad de manera participativa”, enfatizó Ferreira.