DE LA PERIFERIA AL CENTRO: JUJUY Y TARAPACÁ SE UNEN A TRAVÉS DE LA ZOFRI

En pleno casco histórico de San Salvador de Jujuy, a pasos de su plaza central, funcionará desde octubre la primera oficina de la Zona Franca de Iquique (ZOFRI) en territorio argentino. La iniciativa, inédita en medio siglo de historia del sistema franco chileno, busca convertirse en un puente directo entre el Noroeste Argentino (NOA), Tarapacá y los mercados del Asia-Pacífico.
La decisión quedó sellada con la firma de un acuerdo de intenciones que reunió al gobernador de Jujuy, Carlos Alberto Sadir; al presidente del Directorio de ZOFRI, Iván Berríos; y al titular de Puerto Noa, Pablo Mealla.
El compromiso no solo contempla la instalación de la oficina en Jujuy, sino también la apertura de una representación de la provincia argentina dentro de la ZOFRI, en Iquique, replicando así el modelo de intercambio.
“Esta unión histórica va más allá de un acuerdo comercial. Es una oportunidad para reconectarnos y potenciarnos, generando empleos y desarrollo en ambos lados de la cordillera”, afirmó Iván Berríos tras la ceremonia.
Una alianza con mirada al Pacífico
El inmueble ya elegido en calle San Martín #277 será habilitado como un espacio de encuentro: reuniones, conferencias, lanzamientos de productos y vitrinas permanentes para empresarios del Cono Sur que busquen proyección hacia Sudamérica y, principalmente, hacia Asia.
El hito se enmarca en la estrategia de consolidar el Corredor Bioceánico Vial, que une Brasil, Paraguay, Argentina y Chile, posicionando a Jujuy y Tarapacá como nodos estratégicos de comercio transcontinental. La inauguración oficial se espera coincida con el VII Foro de los Territorios Subnacionales del Corredor Bioceánico, en octubre próximo.
“Así como llegamos a Jujuy con nuestra primera oficina fuera de Chile, también daremos el paso para que Jujuy esté presente en la ZOFRI de Iquique. Es un compromiso mutuo que marcará un antes y un después en la relación entre nuestros territorios”, añadió Berríos.
Continuidad y desafíos
El gobernador Carlos Sadir destacó que este acuerdo da continuidad al trabajo iniciado en 2024, cuando visitó Iquique para explorar las oportunidades del sistema franco. “ZOFRI nos abre la posibilidad de llegar a un mercado enorme, como es el asiático. El desafío ahora es dinamizar el tránsito fronterizo y reducir la burocracia en pasos como el de Jama”, advirtió.
En la misma línea, Pablo Mealla, presidente de Puerto Noa, subrayó que se trata de “una oportunidad histórica” para que Jujuy recupere protagonismo en el comercio exterior. “No queremos ser más periferia. Queremos ser la puerta de entrada y salida de Argentina hacia el Pacífico y hacia el mundo”, remarcó.
Hacia un futuro compartido
El acuerdo es visto como un paso simbólico hacia un desarrollo integrado. Jujuy, históricamente considerada lejana en el mapa económico argentino, se proyecta ahora como bisagra continental; mientras que Tarapacá refuerza su rol de plataforma logística global.
El puente comercial que comienza a trazarse no solo abre mercados: también conecta historias, territorios y aspiraciones comunes. Una apuesta por transformar la geografía en oportunidad y el corredor bioceánico en un destino compartido.